CAMBOYA, junio 29.- La casa de una familia en una aldea de Camboya se ha convertido en atracción turística debido a uno de sus habitantes: una pitón (python molurus bivittatus) de seis metros de largo y 120 kilos de peso.
El animal tenía un metro de longitud cuando llegó a la aldea y fue adoptada por la familia, que vio en su aparición un a señal de buen augurio.
En esa época, la familia tenía un bebé de tres meses, llamado Samrath. La serpiente y el niño crecieron juntos y hoy son prácticamente inseparables. El menor, hoy de seis años, juega con la mascota y, de vez en cuando, hasta duermen juntos.
No comments:
Post a Comment